La gastronomía en el Camino Francés

Patio interior del monasterio de Samos

TH. El peregrino tras partir de Triacastela tiene dos opciones a seguir: llegar a la villa de Sarria a través de San Xil y atajando así cinco kilómetros o en cambio desviarse hasta la localidad de Samos donde le espera su monasterio y los monjes benedictinos. En esta localidad además de todo lo derivado del cerdo, con lo que se elaboran sabrosas empanadas, destacan las anguilas y las truchas del Oribio y el Lóuzara. Vinculados históricamente al monasterio, gozaron de gran fama el Licor Pax, destilado de la flor de toxo, y los bizcochos elaborados por los monjes de Samos. Las castaña es otro de los productos típicos de la zona.

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